Más de 27,400 productos lácteos, incluyendo leche en polvo, líquida y procesada; fórmula para lactantes y yogures, han sido decomisados en los últimos dos años. Estos son productos que al ser consumidos representan un riesgo para la salud de quien los ingiere.

En el caso específico de los yogures, es común encontrarlos en depósitos, tiendas y puestos de mercados donde las fechas de vencimiento son ilegibles debido al deterioro de los envases, o donde la consistencia no corresponde a la habitual en los supermercados. Esto representa un riesgo significativo, especialmente para los niños, indica Muriel Ramírez, representante de la Comisión de Defensa del Comercio Formal (CODECOF), de la Cámara de Industria de Guatemala (CIG).

El valor de las mercaderías decomisadas de productos lácteos y derivados, durante los años 2022 y 2023, supera los Q2 millones, según la Superintendencia de Administración Tributaria (SAT), informó la CODECOF, desde donde se enfatiza la importancia de informar sobre el trabajo del Consejo Interinstitucional para la Prevención y Combate a la Defraudación Fiscal y al Contrabando Aduanero (COINCON).

Además, se busca alertar a la población sobre los riesgos sanitarios asociados al consumo de productos que han perdido su cadena de valor debido al transporte inadecuado.

Estos artículos son frecuentemente transportados en vehículos, portaequipajes de transporte público e incluso a la intemperie en picops. Esto es especialmente crítico para aquellos productos que requieren una cadena de frío para su preservación y consumo óptimo, se indicó.

Durante los últimos dos años las incautaciones más frecuentes de productos lácteos, incluyendo leche en polvo, líquida y procesada; fórmula para lactantes y yogures, totalizando alrededor de 27,400 productos, con un valor estimado de Q2 millones.

En el caso específico de los yogures, es común encontrarlos en depósitos, tiendas y puestos de mercados donde las fechas de vencimiento son ilegibles debido al deterioro de los envases, o donde la consistencia no corresponde a la habitual en los supermercados. Esto representa un riesgo significativo, especialmente para los niños, indica Muriel Ramírez, representante de la CODECOF.

Según la información proporcionada por COINCON, la región occidental registra el mayor número de incautaciones de productos lácteos, lo que sugiere que todo el contrabando que ingresa al país proviene de México.

Esta situación genera una competencia desleal, ya que estos productos no pagan impuestos al ingresar al país, además de que incumplen las condiciones adecuadas de transporte.

Para la CODECOF es importante fomentar el sector formal y productivo. El sector de lácteos genera 46 mil empleos directos con mayor impacto en el sector rural.

Además, la industria láctea destina alrededor de Q2,200 millones al año para la compra de leche de los productores nacionales, cifra que evidencia la importancia y el dinamismo del sector para la economía local.

El valor agregado dentro de su cadena de valor incluye productores, trabajadores de finca, ordeñadores, acopiadores, transportistas, procesadores, comercializadores, así como los prestadores de servicios de genética, alimentación animal, sanidad animal (zootecnistas y médicos veterinarios), proveedores de materias primas y suministros para la industria, entre otros.